Bed and Breakfast Ker L - Breizh & Breakfast
Servicios principales
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Wi-Fi
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Entrada/Salida exprés
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Playa privada
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Actividades
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Comida/Bebida
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Agradable para niños
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No se permiten mascotas
Ubicación
También disfrutarás de la comodidad de un aparcamiento público cerca.
El Ker L - Breizh & Breakfast Bed and Breakfast se encuentra a menos de 10 minutos a pie del centro de Cancale y a 18 minutos a pie del Eglise Saint-Méen. Está a solo 400 metros del Puerto de la Houle y a una distancia media de Parks Oyster. Los amantes de la naturaleza apreciarán la cercanía al Plage de Cancale, que está a tan solo 450 metros de distancia. El bed and breakfast está situado a 25 minutos a pie de La Ferme Marine de Cancale. El Ker L - Breizh & Breakfast Bed and Breakfast está en frente de la estación de autobuses Port de la Houle.
Con servicio de tetera/cafetera, las habitaciones aptas para alérgicos están equipadas con TV de pantalla plana con canales vía satélite. Algunas habitaciones están equipadas con un cuarto de baño privado con secador de pelo y bañera. En las habitaciones encontrarás almohadas de plumón hipoalergénicas, almohadas hipoalérgicas y almohadas no alergénicas. Los cuartos de baño disponen de bañera y ducha, además de artículos de tocador para huéspedes. Los huéspedes también pueden disfrutar de unas vistas al mar.
El Ker L - Breizh & Breakfast Bed and Breakfast cuenta con un desayuno diario continental. El restaurante Le Querrien está a las puertas del hotel y se especializa en la cocina francesa.
Reseña de un crítico de hotel
Mi experiencia en Kêr L - Breizh & Breakfast en Cancale fue verdaderamente dichosa, especialmente al pasar el Año Nuevo en este acogedor B&B. La amabilidad de Laura y Laura me hizo sentir como en casa, brindando una cálida bienvenida que es difícil de encontrar. Las habitaciones, amplias y con una vista panorámica del puerto, eran un deleite cada mañana; despertarme con el sonido de las olas es algo que se queda grabado en el corazón. El desayuno continental, que se centra en productores locales, fue un auténtico festín; cada bocado era un homenaje a la gastronomía bretona. Además, el baño, con su bañera y modernas instalaciones, proporcionó un merecido relax tras explorar este encantador pueblo conocido por su mercado de ostras. Sin duda, recomendaría este lugar a cualquier viajero que busque una experiencia única junto al mar.